jueves, 27 de octubre de 2011

La vida más antigua del planeta

Desde pequeño, siempre creci con las ansias de la aventura, ya sea a través de las aventuras clásicas como de la Tierra a la Luna o Viaje al Centro de la Tierra (ambas del magnifico visionario Julio Verne), pero si hubo una de las narraciones del siglo XIX que mas me fascinaron fue El Mundo Perdido de Sir Arthur Conan Doyle (el mismo que escribio a Sherlock Holmes).

En dicha aventura, el Profesor Challenger, un explorador se adentra dentro de la selva sudamericana, en la que ha encontrado prueba, que en una montaña en forma de meseta se encontraba vida prehistorica. Si alguna vez tienen la oportunidad de leer dicho libro, y si son buenos observadores se darán cuenta que sigue casi con exactitud la expedición Henry Whitely por el Amazonas.

Lo que mas me impresiona, es como la ficción se vuelve realidad....

Hace algunos días, asistí al evento TEDxElAvilaNationalPark y entre los ponente se encontraba el Cientifico, Explorador y Fotógrafo Charles Brewer Carías, y aunque su nombre de momento me resultaba desconocido, si habia ojeado al menos una de sus obras (Roraima, La Montaña de Cristal). Ataviado al mejor estilo de un Profesor Challenger moderno, nos fue adentrando en esa tierra mágica que llamamos La Gran Sabana, adentrandonos poco a poco, en la majestuasidad de la caverna encontradas en el Tepuy Chimanta  y poco a poco mi mente, fue transportandome a la famosa escena de Carneige Hall en la que mostraba su gran descubrimiento.

Y el descubrimiento no se hizo esperar:

En el macizo del tepui Chimantá, este intrepido explorador venezolano junto a otros expedicionarios se adentrarón -a pesar del vértigo generado por sus dimensiones- en una cueva todavía sin identidad para la ciencia cuando de repente, su compañero de expericion Mayora cuenta: "Estábamos caminando por la caverna, una caverna de cuarcita. Llamé a Charles, y le pedí que se acercara porque había algo que estaba creciendo. Vimos estructuras como corales, en el suelo, que se abrían igual que un árbol. Concluimos que era algo que crecía con base en un patrón; un organismo vivo".

Brewer le puso nombre: bioespeleotema. Un espeleotema es un depósito de materiales dentro de una caverna, que forma las estalactitas (de arriba hacia abajo) y las estalagmitas (de abajo hacia arriba).

El añadido de "bio" puntualiza que son materiales vivos. Algo que, de acuerdo con el propio naturalista, no existe. Más preciso aún: no existía para la mente humana. Las pruebas científicas, sin embargo, sugieren una respuesta entre tantas interrogantes: se trata del organismo vivo más antiguo. Una de las piezas, evaluada mediante espectrometría de masa, tiene 322.000 años de existencia.